¿Quieres motivarte a estudiar, organizarte mejor para aprender y no sabes cómo hacerlo? A continuación, encontrarás una serie de sugerencias que podrán ayudarte.
- Crea un horario flexible, que te permita abarcar los compromisos que tienes en distintos ámbitos de tu vida (académico, familiar, social). Utiliza las horas libres para estudiar en bloques de 45 minutos, dándote un recreo de 15- 20 minutos, durante los cuáles te des un premio o hagas alguna actividad entretenida y gratificante para ti, que te permita distraerte. Por ejemplo, puedes hablar por teléfono, revisar las redes sociales, comer algún snack, dar un paseo, etc.
- Mantén tu agenda al día: anota todos los compromisos personales y académicos que tengas. Define cuánto tiempo necesitas estudiar para cada prueba o para completar cada ensayo o trabajo. Luego registra en tu agenda cuándo comenzarás a trabajar en cada tema, para cumplir el plazo de entrega. Así podrás organizarte mejor y cumplir con los plazos estimados.
- Cuéntale a algún amigo o familiar cuál es tu plan de estudio, para que ellos te ayuden. Por ejemplo, podrían acordar que les darás $1000 cada vez que no cumplas con una tarea agendada. Créeme que ese motivador será suficiente, ya que no querrás gastar tu mesada en esto.
- Estudia todos los días: puedes establecer un tiempo específico para leer, repasar, hacer ensayos o proyectos. Recuerda estudiar con el sistema de 45-15 min. Y darte una recompensa o premio durante cada recreo para mantener tus niveles de motivación elevados y estables. También puedes usar las ventanas u horas libres para realizar trabajos en grupo, ir a la biblioteca a buscar textos de apoyo, resolver tus dudas, etc.
- Estudia a la hora de día en que seas más productivo: algunas personas se concentran mejor en las mañanas (“alondras”) y otras en las noches (búhos). Elige el horario que más te acomode y organízate. Recuerda siempre que necesitas descansar y dormir 8 horas cada noche, para que puedas rendir bien al día siguiente.
- Si te cuesta empezar a estudiar, usa alguna técnica de respiración que te ayude a relajarte: puedes respirar profundamente, de manera lenta y regular 10 veces, seguidas, para calmar tu cerebro, oxigenar tus neuronas, liberar tu mente de pensamientos negativos y concentrarte mejor. También puedes usar la técnica de los 5 minutos: es un autoengaño positivo donde te dices que sólo estudiarás 5 minutos y nada más, y lo que sucederá es que a los cinco minutos te darás cuenta de que puedes seguir estudiando perfectamente por más tiempo, y seguirás de largo, consiguiendo avanzar.
- Divide los proyectos largos, en fragmentos, para que puedas avanzar un poco cada semana, en vez de hacerlo todo apurado a última hora, antes de la fecha de entrega. Así te sentirás más motivado, verás cómo avanzas y obtendrás buenos resultados, aprendiendo en el proceso.
- Ten un espacio especifico para estudiar ya sea en tu casa o en una biblioteca: así podrás tener organizados todos los materiales que necesites, enfocarte tranquilamente en tu aprendizaje, y tu mente ya sabrá cada vez que entres a ese lugar que es momento de estudiar, y adoptará una actitud acorde a ello.
- Estudia con amigos o compañeros que te ayuden a cumplir con los temas a tiempo: rodéate de personas que valoren los logros, las buenas notas, los aprendizajes, ser buenos profesionales y estudiantes destacados, y verás cómo pronto querrás seguir su modelo.
- Pide ayuda si intentas aplicar esto tips y aun así, no consigues motivarte para estudiar ni organizarte mejor: puedes acudir a centros de asesoramiento estudiantil universitarios, recurrir a tus docentes o ayudantes, buscar profesores particulares, trabajar con psicólogos educacionales que te orienten a estudiar y aprender mejor.
Te invito a poner en práctica estas sugerencias y compartir cuál ha sido tu experiencia. Recuerda que siempre puedes pedir ayuda especializada, si sientes que la necesitas.
Es una actitud madura y responsable utilizar todos los recursos a tu alcance para sentirte realizado como persona y futuro profesional.
Deja una respuesta